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La sal es el condimento básico de toda cocina, convirtiéndose así en el ingrediente más indispensable, pero para que siga otorgando ese sabor único es importante mantenerla en perfectas condiciones y sin rastros de humedad, algo que es común que suceda por la capacidad de absorción.
Este es el problema al que se enfrentan en restaurantes y hogares. Sin embargo, es más común en ambientes húmedos, como el de las ciudades de la costa, que la sal se humedezca en el salero, o peor, que incluso surjan unas gotas de agua. Aunque la sal se pueda seguir usando en ciertas preparaciones o se pueda rescatar, es importante mantenerla siempre fresca. En esta nota te decimos el por qué se humedece la sal y cómo evitarlo.
¿Por qué se humedece la sal y cómo evitarlo?
Como sabemos la sal es un producto higroscópico, en otras palabras, la sal absorbe la humedad del ambiente. ¿Cómo? Gracias a las moléculas de agua que flotan en el aire, las cuales, al pasar cerca a la sal, se pegan a su superficie.
Los elementos o productos que comparten esta cualidad se usan como deshumedecedores de ambiente o en los pañales, por ejemplo. Sin embargo, evitar que la sal se humedezca y estropee el sabor de las comidas no es tan imposible como suena, aquí te compartimos algunas sugerencias, pero que son de las más frecuentes y eficaces.
Utiliza un contenedor que esté completamente seco, se recomienda que sea de vidrio porque los recipientes de plástico tienden a absorber la humedad con más facilidad.
Otra técnica conocida e implementada en los saleros de los restaurante, es insertar granos de arroz dentro del contenedor de sal, ¿por qué? Fácil, porque el arroz no hará más que absorber toda humedad y así evitar la formación de piedras.
Si bien a pareciera que no es necesario hacer algún tipo de limpieza, la realidad es otra. Lava el recipiente cada semana o cada 15 días como mínimo y luego sécalo en su totalidad.
Porque a pesar de que te asegures de que el recipiente donde pondrás la sal esté totalmente seco, al estar cerca del refrigerador o de lugares húmedos como lavaderos, la humedad del ambiente será mayor a la que los granos de arroz puedan absorber.
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