Receta de Pan de muerto

Alrededor del país podemos encontrar gran variedad de panes dulces. El pan de muerto es uno de esos dulces tradicionales de México que no puede faltar para el Día de Muertos.

Este platillo típico de México se puede encontrar en diversas presentaciones, pues hay estados donde solo es azucarado, mientras en otros se barniza de huevo y ajonjolí, se pinta de rojo o se rellena con cremas de sabores.

Ingredientes:

• ¼ taza de agua tibia.
• 1 cucharada de levadura.
• 5 tazas de harina de trigo.
• 4 huevos.
• 2/3 taza de leche condensada.
• 1 cucharadita de sal de mar.
• 1 cucharada de agua de azahar.
• 2 cucharadas de ralladura de cáscara de naranja.
• 1 taza de azúcar.
• 1 taza de mantequilla.

Procedimientos:

1. Disolver la levadura junto con una pizca de azúcar en el agua tibia y dejar reposar hasta que fermente.
2. Colocar la harina como si fuera un pozo y en el espacio del centro depositar la leche condensada, los 4 huevos, la sal de mar, la ralladura de cáscara de naranja, la vainilla y el agua de azahar. Mezclar hasta incorporar.
3. Incorporar la mantequilla poco a poco, al igual que el azúcar mientras se amasa por 15 a 30 minutos.
4. Dejar la masa reposar en un recipiente engrasado y cubierto hasta que duplique su tamaño.
5. Retirar del recipiente y dividir en 6 partes. 5 partes se forman como círculos y la sobrante se usa para hacer las bolitas y huesitos de decoración.
6. Depositar los círculos en una charola para el horno con papel para hornear. 
7. Barnizar los círculos de masa con un poco de agua y colocar las piezas de decoración. Dejar reposar.
8. Barnizar los panes de muerto con un poco de huevo batido y espolvorear con azúcar.
9. Hornear a 180° C hasta que este dorada la superficie, aproximadamente 18 minutos. Al retirar se puede agregar más azúcar mientras se deja enfriar.

Recuerda que antes de empezar a preparar los ingredientes deben estar a temperatura ambiente. De igual manera puedes utilizar una batidora para no amasar a mano.

Puedes disfrutar de tu pan de muerto acompañado de un café o si quieres un postre más innovador, lo partes a la mitad y lo rellenas de crema de avellana con fresas o queso de bola.