Tortuga Carey: especie que anida en Las Coloradas

Cuando se habla de animales marinos uno de los primeros que viene a la mente son las tortugas marinas, siendo la tortuga carey una de las especies más amenazadas alrededor del mundo, con una población que ha disminuido de manera considerable a través de los años.

Pero, ¿qué caracteriza a esta especie y qué se hace al respecto sobre su protección? En este artículo se abarcan aspectos importantes sobre este reptil, como sus particularidades, hábitat, reproducción, y qué acciones se toman —a nivel nacional e internacional—con respecto a su manejo, protección y conservación.

banner de sal de mar

Características de la tortuga carey

Conocida como tortuga carey, su nombre científico es Eretmochelys imbricata; pero en inglés su nombre común es hawksbill sea turtle, lo que se traduce como ‘pico de halcón’ dada la particular forma de su mandíbula superior, que asimila a la de dicha ave.

Su alimentación se compone de esponjas, camarones y anémonas, entre otros organismos que, gracias a la forma de su mandíbula —similar a un pico—, puede extraer de las grietas de los arrecifes y zonas de complicado acceso.

Entre sus características físicas está que en su juventud su caparazón tiene forma de corazón y con su desarrollo va adquiriendo forma oval; este tiene un diseño a rayas o ‘jaspeado’ que caracteriza a la especie, con tonos amarillos y cafés.

En la edad adulta, las tortugas carey miden hasta 90 cm, y tienen un peso promedio de 80 kg; aunque pueden alcanzar más de 100 kg, siendo que se han registrado ejemplares de 127 kg.

Las hembras y los machos de esta especie, en su etapa adulta, presentan diferencias en su apariencia física. Esta distinción no es notable a la vista, entre las etapas de cría hasta subadulto son prácticamente iguales.

Entre estas diferencias está que los machos tienen una cola larga y gruesa que sobresale del caparazón, y también poseen unas largas y fuertes uñas, mientras que su plastrón es cóncavo y suave. Por el contrario, las hembras tienen una cola corta que casi no sobresale del caparazón, sus uñas son cortas y su plastrón es menos cóncavo y duro.

tortuga carey

Distribución de la especie

En lo que respecta a su distribución se encuentran en aguas tropicales y subtropicales del océano atlántico, pacífico e Índico; siendo considerada la especie más tropical entre las tortugas marinas, con sus principales zonas de alimentación y anidación en los trópicos de Cáncer y Capricornio. 

En México, la anidación de la tortuga carey da lugar en ambos litorales del país, con un mayor incidencia en el golfo de México y el Caribe Mexicano. Una de sus zonas de anidación en la costa yucateca son las playas de Las Coloradas, lugar reconocido por sus atractivas aguas rosadas, pero también un importante punto de producción salinera, llevando a los hogares del país la sal de mar #1 en México.

Otros estados del país, además de Yucatán, donde principalmente se pueden encontrar son Baja California, Baja California Sur, Campeche, Veracruz, Quintana Roo, Chiapas, Nayarit, Oaxaca, Colima, Jalisco, Guerrero, Sinaloa  y Sonora.

Reproducción

Esta especie de tortuga alcanza la madurez sexual entre la edad de 16 a 20 años, punto en el cual decrece la tasa de crecimiento. Al salir del cascarón miden apenas un par de centímetros y se les considera juveniles cuando su tamaño alcanza los 25 cm y hasta los 55 cm, los adultos miden más de 70 cm.

En las temporadas de anidación —que son aproximadamente cada 2 años— las tortugas carey arriban solas o en pequeños grupos a las playas y depositan entre 140 a 160 huevos, siendo que el tiempo de incubación oscila entre los 60 días; este proceso puede ser repetido hasta 5 veces dentro de la misma temporada.

La forma de los huevos es esférica, de un diámetro de aproximadamente 40 mm, comparable a una pelota de tenis. 

Las crías son de un tono marrón oscuro, y es a medida que crecen que van tomando su coloración característica en el caparazón, en una mezcla de tonos que van del amarillo al negro.

crías de tortuga llegando al mar

El sexo de las tortugas carey se determina de igual manera que el resto de las tortugas marinas por la temperatura de incubación, siendo que las temperaturas elevadas producen más hembras y las temperaturas bajas dan como resultado machos.

Las crías presentan un comportamiento descrito como ‘frenesí natatorio’ entre el momento que logran salir del nido y hasta alcanzar el océano, respuesta que les ayuda a sobrevivir.

Protección de la tortuga carey

Actualmente este animal marino se encuentra clasificado como especie en peligro crítico de extinción por parte de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Esta especie de tortuga se ve amenazada por acciones como la caza, el consumo de su carne y huevos, y la pérdida de su hábitat. 

Hay individuos que profanan sus nidos para robar los huevos dado que se venden como afrodisíacos; o les dan caza por su carne que aún es considerada como un manjar en algunos países.

Otro de los motivos detrás de su caza indiscriminada es que los jóvenes y adultos de esta especie poseen un caparazón bastante llamativo en diseño y muy hermoso, con un patrón de rayos en amarillo, negro, canela y marrón en cada escudo; por lo que se destina como decoración o material para elaborar artesanías.

De igual manera influye los cambios morfológicos de las playas, infraestructura turística, las barreras y residuos sólidos en las playas, el uso recreativo de las playas durante la anidación –por la destrucción de nidos  y la mortalidad de las crías emergidas–, pérdida de vegetación, malas prácticas pesqueras, ingesta de residuos sólidos por parte de las tortugas y tránsito marítimo, entre otros.

La conservación es de gran importancia por razones ecológicas y de biodiversidad, puesto que la tortuga carey desempeña un papel importante en la salud de los ecosistemas que forma parte. 

Un claro ejemplo de su papel en la naturaleza es que se alimentan de animales marinos que pueden ser invasivos—como esponjas—que representan competencia para otras especies; lo cual permite mantener estas poblaciones bajo control y así preservar el equilibrio del ecosistema.

caparazón de tortuga carey

México forma parte del convenio internacional de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES) que tiene como objetivo la protección de miles especies de animales y plantas; y con acciones como prohibir la comercialización de las tortugas carey.

De igual forma, el país es parte de otros programas de cooperación internacional, como:

  • La Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas (CIT), tratado intergubernamental que entró en vigor en 2001 y promueve la protección, conservación y recuperación de las poblaciones de tortugas marinas, así como dar pie a un esquema de cooperación para la protección de tortugas marinas.
  • El Comité Trilateral Canadá-México-Estados Unidos para la Conservación y Manejo de la Vida Silvestre y los Ecosistemas, que se enfoca en establecer una perspectiva continental integral para la conservación y uso sustentable de los recursos.
  • La Convención de Ramsar, en relación a los humedales de Importancia Internacional, siendo uno la reserva Ría Lagartos.
  • Convenio sobre Diversidad Biológica.

Una acción permanente en México —en materia de investigación, protección, conservación y rescate de las tortugas marinas— es la creación, el 2 de diciembre de 1993, de la Comisión Intersecretarial para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas, para coordinar las acciones de las distintas dependencias de administración pública, esto como parte del Programa Nacional de Protección y Conservación de las Tortugas Marinas.

En Yucatán, existen diferentes programas establecidos con el objetivo de proteger a la población de tortugas marinas, en especial las 2 especies que arriban a esta zona: la tortuga carey y la tortuga verde.

Entre estos programas está el de Conservación de Tortugas Marinas que implementa Pronatura Península de Yucatán A. C. (PPY). Este recibe el financiamiento y colaboración de diversas instituciones, entre estas la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Industria Salinera de Yucatán S.A. de C.V.

Entre las acciones que se toman en estos programas está el monitoreo y protección de las playas en la temporada de anidación, el periodo de eclosión de los huevos y el traslado de las crías desde que salen de los nidos hasta el océano. En estas etapas se procura salvaguardar a las tortugas de amenazas como depredadores o la intervención de los seres humanos.

También se procura la recopilación de información para mejorar el manejo de las especies que arriban a Yucatán, la instrucción y sensibilización de la población en general, en especial para los sectores que se ven involucrados con las tortugas marinas o su hábitat, como el pesquero, turístico y hotelero.

tortuga carey nadando

Estas tortugas llegan a las playas que se encuentran dentro del área natural protegida de Ría Lagartos, —de la cual forma parte Las Coloradas— una Reserva de la Biósfera que alberga miles de animales, entre los que se encuentra otra especie protegida e icónica: el flamenco rosado del Caribe, ave acuática de un distinguible plumaje rosado que la hace sobresalir.

Las Coloradas, Yucatán es una región reconocida nacional e internacionalmente por sus impactantes aguas rosadas, así como su importante población de flamencos del Caribe, factores que atraen el flujo turístico a la zona, donde se ofrecen visitas guiadas para conocer este lugar más a fondo. 

Pero esto no es todo lo que brinda, pues es el hogar de la sal de mar Sal Sol, el ingrediente que le da el mejor sabor ideal a cada platillo, todo mientras conserva minerales que son importantes para la salud.

Debemos procurar la conservación de la naturaleza

La preservación del medio ambiente y de las especies que lo habitan —como las tortugas marinas— es responsabilidad de todos, por lo cual es importante estar informado sobre los animales con los que compartimos el planeta y ser consciente de que nuestras acciones tienen un impacto.

La conservación de las tortugas marinas —como la carey— es una tarea en la que se puede participar con diversas acciones, como el cuidado de playas y océanos; así como respetar las temporadas de arribo de las tortugas para anidación, la eclosión de los huevos y el recorrido de las crías desde el nido hasta el mar.

En Sal Roche, estamos comprometidos con brindarte la sal de mar #1 en México, siguiendo los estándares de calidad mientras se respeta el entorno ecológico. También tenemos presente la conservación de las especies, que habitan en Las Coloradas y en todo el resto de la reserva Ría Lagartos. 

Es por ello que ISYSA patrocina programas para el cuidado de especies protegidas desde hace 20 años, en coordinación con la CONANP y organizaciones no gubernamentales como PPY.

Si quieres conocer más sobre estilo de vida, recetas, alimentación y salud, te invitamos a conocer mejor este blog donde puedes encontrar contenidos como los animales rosados que no conocías, los beneficios del taro y las diferencias entre la sal marina y la sal del Himalaya.

Referencia: 

SEMARNAT. Dirección General de Operación Regional Dirección de Especies Prioritarias para la Conservación. Programa Nacional para la Conservación de Tortugas Marinas. PROGRAMA DE ACCIÓN PARA LA CONSERVACIÓN DE ESPECIES: TORTUGA CAREY, (Eretmochelys imbricata). 

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