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El jitomate es un fruto muy utilizado en la gastronomía mexicana que se emplea para preparar multitud de guisos, desde las típicas salsas picantes mexicanas que abundan en todo el ancho del territorio, hasta como parte de una ensalada de lechuga con limón y sal de mar.
Pero esta hortaliza no solo es un alimento delicioso, también es fuente importante de variados nutrientes, por lo cual no es sorprendente que se recomiende su consumo diario y también esté presente en remedios de medicina tradicional.
En este artículo hablaremos sobre varios aspectos del jitomate: sus nutrientes, beneficios al organismo y algunas de sus aplicaciones dentro y fuera de la cocina.
Conocido como jitomate o tomate rojo —dependiendo de la región— pero de nombre científico Solanum lycopersicum, este producto es un fruto que se puede encontrar en cualquier estado de la república mexicana, así como prácticamente en todo el mundo.
Aunque en gran parte de Latinoamérica se le llama tomate, en el centro y sur de México es más común la denominación de jitomate, dejando el término tomate para lo que también se conoce como tomate verde o de cáscara.
Existen muchos tipos de jitomate como el kumato, liso, muchamiel, raf, andine cornue, corazón de buey, marglobe, entre otros; en México podemos encontrar principalmente algunas variedades, como el bola, cherry y saladette, cada uno con características que los distinguen:
Esta hortaliza tiene una diversa composición de elementos benéficos para el organismo por lo cual es considerado un alimento saludable; en este se encuentran minerales, oligoelementos, compuestos orgánicos y vitaminas, como:
El jitomate es un alimento que está presente de cientos de formas en la cocina, pues con este se pueden preparar jugos, sopas, pastas, purés, salsa catsup y mucho más; es increíblemente versátil pues se disfruta crudo, frito, hervido, escalfado o como lo prefieras.
Por su contenido nutrimental no es sorpresa que sea ingrediente base para remedios naturales, como la recomendación de tomar el jugo de tomate crudo para ayudar a limpiar la piel y los órganos.
Entre los beneficios más importantes y reconocidos del jitomate se encuentran:
El licopeno es un carotenoide de gran acción antioxidante que ocasiona el color rojo del jitomate y ayuda a proteger de los radicales libres.
Pero el licopeno, por su misma acción de prevención al daño oxidativo de moléculas como el ADN —entre otros—, también aporta toda una serie de beneficios que aún se siguen estudiando y son objeto de investigaciones, como su efecto para proteger de distintos tipos de cáncer.
Una particularidad del licopeno es que se absorbe mejor en los casos de productos procesados que en los crudos, como purés o concentrados, puesto que el calor rompe las membranas celulares y permite su liberación.
De igual manera el consumo de licopeno en la dieta diaria está relacionado a la reducción de los niveles de LDL (colesterol malo).
En su composición se encuentra la vitamina K, que ayuda a controlar la coagulación. También contiene betacaroteno, el cual está relacionado con la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares. Y el licopeno, que se ha vinculado a la disminución de la presión sanguínea sistólica.
Varios estudios han vinculado el licopeno, que es un gran antioxidante, con un efecto de prevención en la aparición de algunos tipos de cáncer.
Su aporte de nutrientes, especialmente la fibra y su contenido de agua, ayuda al buen funcionamiento del tracto intestinal, así como para prevenir el estreñimiento y otros padecimientos gastrointestinales.
Al ser rico en ácido fólico, el cual sirve para prevenir defectos congénitos, es recomendado su consumo entre las mujeres embarazadas. De igual manera el tomate también aporta carotenos y se ha propuesto que el efecto antioxidante de estos puede ayudar a un mejor desarrollo del embrión, reduciendo así el riesgo de parto prematuro.
Un remedio casero popular es colocar las rebanadas de tomate en el rostro, si te preguntas: ¿para qué sirve el jitomate en la cara? La respuesta es que las propiedades antisépticas, así como el alto porcentaje de agua que contiene este fruto ayudan a hidratar mientras calman la inflamación e irritación de la zona.
También se ha encontrado que el consumo de betacaroteno ayuda con la protección contra daños por la radiación solar y así promover una piel más sana.
Ya sea por exposición al sol o como consecuencia de un accidente con alguna fuente de fuego, los tomates son un remedio rápido para calmar la piel que se encuentra irritada. Solo debe aplicarse en rebanadas sobre la zona afectada y dejar actuar de 10 a 20 minutos.
Proporciona vitamina A, la cual ayuda a prevenir enfermedades degenerativas de la vista. De igual forma los jitomates poseen luteína en menor medida, un carotenoide de actividad antioxidante que es bueno para mantener una buena salud ocular y la reducción de la pérdida visual por degeneración macular.
Por su contenido de minerales y vitaminas, en especial la vitamina C, el tomate es un alimento que puede ayudar a reducir los cálculos biliares.
Uno de los interrogantes que siempre surgen al hablar del jitomate es si se trata de una fruta o verdura. Aunque muchas personas consideran que las frutas son dulces mientras que las verduras son saladas o que la división radica en los colores o aplicaciones en la cocina.
Sin embargo, la división recae en que los frutos son la parte de la planta donde se encuentran las semillas, mientras que las verduras son cualquier otra parte de la planta, sea la raíz, tallo, flor, tubérculo, bulbo u hojas.
Si se especifica más, en el ámbito de la botánica el jitomate es una baya, dado que cumple con los componentes que determina lo que se considera baya, los cuales son que las semillas están dentro de la pulpa, posee una pulpa carnosa y una piel externa.
Por esta razón los jitomates son biológicamente frutas aunque en la cocina reciben normalmente el trato de una verdura.
Ya sea que vayas a preparar un coctel bloody mary, una sopa o para colocar dentro de un sandwich, seleccionar los mejores tomates te ayudará a conseguir un mejor sabor final en tus recetas, así como aprovecharlo en su mejor momento.
Algunos consejos para escoger jitomates:
Ahora, en cuestiones de conservación, es recomendable lavar previamente el jitomate y después del secado disponer de este para cocinar o guardar. Para mantener los jitomates en buen estado lo mejor es colocarlos en una zona fresca al aire libre —si aún no están completamente maduros— y después se pueden preservar de 5 a 7 días en refrigeración.
Esta hortaliza es de una de las plantas que se puede sembrar en los hogares dado que las semillas se consiguen del mismo fruto y crecen naturalmente en gran variedad de suelos mientras tengan buen drenaje. Además, después de 3 a 5 meses ya es posible empezar a recoger los tomates maduros.
Para cultivar jitomates se debe colocar 2 o 3 semillas en un semillero con sustrato y proporcionarle agua constantemente, supervisando que nunca se quede seco. Lo mejor es dejar el semillero cubierto con papel film para no perder la humedad.
Después de un par de días empezaran a surgir los brotes y cuando la planta alcance unos 15 cm es momento de transplantar a una maceta, para permitir que se desarrolle por un par de semanas antes de pasar al suelo y añadirle una varilla para que se sostenga cuando empiecen a salir los frutos y el peso no la tire.
Esta cosecha se desarrolla mejor en los climas cálidos, durante la temporada de primavera, con bastante exposición solar y riego constante.
Debido a su versatilidad de preparación, facilidad de adquisición y propiedades benéficas para la salud, el jitomate es una hortaliza que no debe faltar en tu hogar. Aprovecha los jitomates diariamente, ya sea en un jugo de tomate, una ensalada o un par de rebanadas frescas dentro de tu sandwich.
En todo caso, contar con jitomates en casa también puede ayudarte en casos de picaduras de insectos, pues se pueden colocar unas rebanadas frescas para calmar la irritación e inflamación de la zona.
Cabe mencionar que muchos profesionales de la salud, así como la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomiendan consumir diariamente 5 porciones de frutas y verduras para ingerir los nutrientes que el cuerpo requiere para sus funciones, por lo cual es importante conocer los insumos que seleccionamos y lo que le aportan al organismo.
Si quieres conocer más sobre cómo llevar una dieta balanceada te recomendamos nuestros artículos sobre las propiedades del ajo y los beneficios del limón, así como las diferencias entre la sal de mar y sal del Himalaya.
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Referencias:
Navarro-González, Inmaculada, & Periago, María Jesús. (2016). El tomate, ¿alimento saludable y/o funcional?. Revista Española de Nutrición Humana y Dietética, 20(4), 323-335.
Procuraduría Federal del Consumidor. (2917). Ponle color y sabor a tu vida, el jitomate.